Cierro mi mano y siento la tierra que el campesino arrojó, sombrío, en el mar.
La belleza del pájaro bogador perdido entre las nubes. Ausencia; tiempo callado o distraído. Aún en estos días de destrucción y de ceniza.
Carlos Penelas
Buenos Aires, 20 de marzo de 2013
1 comments
Carlos Penelas:
ResponderEliminarMuy bello texto, evocativo de las esperanzas de los mayores, que aun no se han cumplido.
Un gran abrazo.