Carta de la Dra. Graciela Maturo sobre "Homenaje a Vermeer"
Querido Carlos, no hay derecho, por más amigo que uno sea, de largarnos semejante aluvión como un mazazo sobre la nuca.
Esta mañana leí tu libro y recibí ese impacto. Tenía ante mí un banquete, un tratado de erotismo, pintura y poesía, una autobiografía encubierta, un despliegue del amor y de la belleza y mucho más en verso y prosa, todo ello centrado en el trato con dos momentos de la pintura europea: el Quattrocento italiano (que tanto amo) y la pintura holandesa del siglo XVII: Vermeer (muy refinada, de la que algo conozco).
Es un libro para saborear, para detenerse, para conocer un poco más de tu pantagruélico amor a la vida, y también – los eruditos- para encontrar perlas de historiadores y críticos del arte hasta los cuales no llego. Bueno, esto es solamente una primera devolución de este libro extraordinario, pleno, sorprendente, acariciante y abrumador, donde aparecen – siempre- la amada, y las imágenes de Manuela y Manuel, tus ángeles tutelares. Ya habrá un momento para escribir algo mejor sobre el libro, por ahora mi admiración y gratitud. Graciela.
0 comments